Tu espacio de trabajo en casa

Tu espacio de trabajo en casa

Cada vez somos mas las personas que trabajamos en casa, o al menos que desarrollamos parte de nuestra actividad desde el hogar dulce hogar. Pero para poder concentrarse y estar a gusto, es necesario sentirse cómodo y que el espacio destinado para ello cumpla un mínimo de requisitos. Estas son algunas de las claves que pueden hacer de cualquier rincón un espacio óptimo para desarrollar cualquier tipo de actividad.

El tamaño no importa. No necesitamos tener un gran espacio dedicado únicamente a despacho, estudio u oficina. Lo que si es fundamental es que sea un espacio visualmente delimitado, que tenga su propia frontera. Hay muchas y variadas formas de establecer los limites, a veces, una simple alfombra puede crear un espacio, un cambio de color en la pared, una simple estantería que haga las veces de tabique o una cortina, estor o persiana que nos aísle un poco del resto de la habitación.

Busca la luz adecuada. Si puedes aprovechar la luz natural no lo dudes, el trabajar en un lugar luminoso nos hace sentirnos más activos y positivos. Si puedes despejar una zona delante de una ventana mejor que mejor. Si no puedes disponer de luz natural, procura iluminar convenientemente tu zona, sin focos directos ni puntos de luz agresivos que obliguen a forzar la vista, pues à la larga nos producirá cansancio visual. Si eres diestro pon los puntos de luz en el lado contrario, para no hacer sombras con tu propio brazo. Lo mejor es tener varias fuentes de luminosidad no excesivamente potentes y utilizar bombillas con tonos suaves que contribuyan a mantener la concentración sin daña nuestros ojos.

Huye de los lugares de paso. Escoger bien la zona nos ayudara a conseguir buenos resultados de rendimiento. Cuanto mas recogida sea mejor y ya que en todas las casas se establecen circuitos utilizados con más frecuencia, si tu zona de trabajo tiene que tocar o estar próxima a uno de ellos, mejor tenerlos de frente que à la espalda, trabajaremos mas relajados y evitaremos sobresaltos. Deberemos evitar por ejemplo estar en las proximidades de una puerta, o en una zona estrecha donde interfiramos el paso.

Marga G.-Chas Ocaña



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